Quicorras, de 15 años, navegará en optimist desde jávea hasta ibiza en apoyo de la ong Formación Senegal el próximo domingo 3 de septiembre, si se cumplen las previsiones meteorológicas.
Quique Urios Salinas, “Quicorras” deportista de élite valenciano, navegará en Optimist desde la costa de Alicante hasta Ibiza, en una singladura sin precedentes, tanto por la edad de Quicorras, tan solo 15 años, como por el tipo de embarcación: un Optimist de sólo 2,32 metros de eslora con el nombre Formación Senegal – Fermax. La distancia recorrida será de unas 50 millas náuticas y se calcula tardará unas 15 horas. La travesía se realiza en apoyo a la ONG Formación Senegal.
El joven Quicorras lo tiene muy claro. Si el parte meteorológico resulta favorable el próximo domingo 3 de septiembre iniciará una singladura en su Optimist que le llevará a recorrer algo más de 50 millas náuticas entre las costas de Alicante e Ibiza.
La salida será desde el Club Náutico de Jávea y durante todo el trayecto le acompañará un velero de 12 metros de eslora, una lancha neumática, un médico, un buzo y un socorrista para garantizar que la travesía discurra sin incidentes.
La travesía será posible, gracias a empresas tales como Fermax, Satorisan, Sailing Cuack, DCV SailScreen, PolitSub, el Real Club Náutico de Valencia y el Club Náutico de Jávea, que han querido comprometerse en este proyecto con un trasfondo social tan importante.
Esta singladura se realiza en apoyo a la ONG Formación Senegal (www.formacionsenegal.org), una asociación sin ánimo de lucro dedicada a formar jóvenes africanos, hombres y mujeres, que viven en un entorno desfavorable cuya única posibilidad para seguir vinculados a su tierra o disponer de posibilidades de una vida digna es obtener una capacitación profesional. La ONG trabaja principalmente en la zona de Mbacké Kadior, enclavada en la región de Louga, una extensa región que sufre las peores consecuencias del calentamiento global: sequía permanente, el éxodo rural y la emigración masiva que afecta a todo el Sahel africano.
Los paralelismos son claros, mientras cada año, miles de personas pierden la vida en el mar intentando encontrar una vida mejor, esta iniciativa pone de manifiesto que el mar es un lugar para disfrutar, para realizar deportes, para el recreo y la competición. Algo que no debemos olvidar, y así seguir poniendo de relieve realidades tan duras, pero tan reales.Quicorras, que empezó a navegar antes casi que a andar y que sigue buscando apoyos para continuar en la clase preolímpica 29er, se despide con esta travesía de la categoría en Optimist, ya que se puede competir solo hasta los 15 años y lo hace por el mejor de los motivos: el apoyo a chavales de su edad que en otro continente carecen de lo más básico.